Tres adolescentes se declararon culpables este lunes de cargos relacionados con un tiroteo en una fiesta de barrio de Baltimore el verano pasado que mató a dos personas e hirió a otras 28, según los fiscales.
Dos de los acusados, de 15 y 16 años, se declararon culpables de agresión en primer grado y de ser un menor de edad en posesión de una pistola en relación con el tiroteo del 2 de julio en el barrio de Brooklyn, al sur de Baltimore, dijo a CNN el portavoz de la oficina del fiscal estatal, James Bentley.
Como parte de un acuerdo de culpabilidad, los adolescentes fueron sentenciados a cumplir cinco años de detención seguidos de cinco años de libertad condicional supervisada, con 20 años adicionales de detención suspendidos, dijo Bentley. CNN no nombra a los acusados porque son menores.
Un tercer acusado, Mikhi Jackson, que era menor de edad cuando ocurrió el tiroteo pero que ahora tiene 18 años, fue acusado de ser menor de edad en posesión de un arma de fuego y fue sentenciado este lunes a cumplir un año de prisión seguido de dos años de libertad condicional supervisada, según a Bentley. Se suspendieron otros cuatro años de su pena de prisión.
Un cuarto acusado, Tristan Brian Jackson, de 18 años, está a la espera de juicio por siete cargos cada uno de conspiración para cometer asesinato en primer grado e intento de asesinato, así como por otros 41 cargos.
El tiroteo interrumpió una celebración vecinal anual conocida como el Día de Brooklyn. Aliyah González, de 18 años, y Kylis Fagbemi, de 20, murieron y otras 28 personas sufrieron heridas de bala, dijo la Policía. La mayoría de los heridos tenían entre 13 y 19 años, dijo la Policía.
Warren Brown, abogado del acusado de 15 años, dijo que el adolescente aún está procesando la sentencia y es consciente de que se le ha dado una segunda oportunidad que tal vez a otros no se les haya ofrecido.
“El tiene 15 años. ¿Qué sabe él sobre cualquier cosa?”, dijo Brown. “La situación en la que se encuentra este niño es la situación en la que se encuentran miles de personas como él aquí en Baltimore y en tantos otros lugares. Son las armas. Hay una proliferación de armas en muchas áreas urbanas y cuando estos jóvenes tienen acceso a ellas, se produce el caos”.
“Él solo quiere volver a casa con su abuela, quien lo crió”, dijo Brown.
Brown dijo que los fiscales no proporcionaron evidencia suficiente para demostrar que su cliente disparó a nadie, pero sí mostraron evidencia de que disparó múltiples tiros a un grupo de personas, obligándolas a huir.
Mikhi Jackson, además de su año de prisión y dos años de libertad condicional, deberá participar en un programa de intervención contra la violencia comunitaria organizado por la organización local Roca, que dice que tiene como objetivo trabajar con jóvenes de 16 a 24 años en Baltimore para abordar los ciclos de violencia, encarcelamiento y racismo.