Tito Horford, el dominicano que abrió el pesado portón de la NBA, disfruta ahora de todo el glamour en la final que libran Dallas Mavericks y Boston Celtics, en la que su hijo Al Horford también hace historia.
Como testigo de excepción, Tito recibe un trato VIP de parte de los dueños de la exitosa franquicia de Nueva Inglaterra
“Yo le he caído en gracia a los dueños de los Celtics”, manifestó Alfred Horford Williams con una proverbial humildad que a sus 58 años y 7´1 de estatura todavía parece un muchacho grande.
En las transmisiones televisivas de cada partido se le ve en la primera línea de asientos, que en esta final el precio de cada uno ronda hasta los 40 mil dólares.
Por su condición de padre de Al también se le hospeda, tanto en casa como en la ruta, en un hotel cinco estrellas donde pernoctan los jugadores, con camas extra large especializadas.
También es trasladado en Limusina del aeropuerto al hotel, así como al TD Garden, al que ingresa por la vía de acceso de los jugadores, acompañando al decano de los jugadores de los Celtics, quien está a dos pasos de convertirse también en el primer dominicano en lucir el anillo de campeón de la NBA.
“Lo que está sucediendo en este momento es algo histórico”, enfatizó al ser entrevistado en el programa dominical “La Hora del Deporte”, que de once de la mañana a una de tarde se transmite por CDN-Deportes.
“Unas finales de la NBA es donde todo el mundo quiere estar, es el sueño de cada jugador y yo creo que van a lograr la corona porque los Celtics tienen el talento y el hambre”, resaltó Tito, quien acude a los juegos con una réplica de la tradicional franela verde número 42 que utiliza su primogénito.
Tito confía que lo van lograr porque cuentan jugadores de gran calibre, como Jayleen Brown y Jason Tatum, pero también una gran profundidad, en la que sobresalen actores de repartos como Al, Drue Holliday, Kristaps Porzingis y Derrick White.
“Ellos tienen un equipo para ganar. Si usted compara la banca de Boston con la de Dallas hay una gran diferencia y tienen un manager de 35 años, Joe Mazzulla, que es un genio y también a un gerente general, Brad Steven, que hizo un equipo para ganar”, subrayó el otrora centro de la selección dominicana.
Destacó que por donde quiera que se mueve en el estado de Massachusetts recibe elogiosos comentarios sobre Al que le enorgullecen.
“I love Youl son” (Yo amo a tu hijo), le dicen los aficionados de los Celtics una y otra vez cuando sale del hotel a realizar algunas diligencias.
“Humildemente decimos que nosotros no solamente estamos representado a la familia Horford, sino a República Dominicana en un lugar donde nos quieren, y también a Latinoamérica”, declaró.
Dijo que ellos siempre conversan sobre lo que ambos han logrado y coinciden en que todo se debe a la gracia de Dios y a la disciplina.
Declaró que, además de su entrega al equipo, ya sea encestando, rebotando, defendiendo o haciendo otras pequeñas cosas que contribuyen al éxito, Al Horford es apreciado por su identificación y solidaridad con Lawrence, ciudad de Massachusetts, donde residen miles de dominicanos.
Manifestó que el veterano delantero de poder y ocasional centro de Boston, quien también fue el primer nativo de Quisqueya elegido para el Juego de Estrellas de la NBA (2010), se maneja en bajo perfil y no dice las cosas buenas que hace con la comunidad.
SEPA MÁS
Revelación
Tito era fanático de los Lakers de los Ángeles y vivió la gran rivalidad que tuvieron con los Celtics en la década del ´80, pero desde que su hijo mayor llegó a Boston por primera vez en la estación 2016-17 sus simpatías cambiaron.
Deseo incumplido
Siempre tuvo el deseo de que los Lakers o Boston le seleccionaran en el Sorteo, pero fueron los Bucks de Milwaukee que lo ficharon en la casilla 39 en 1988, uniforme que vistió dos campañas (1988-89, 1989-1990). Tras ser dejado libre jugó con Washington Bullets (1993-94).
Huelen a campeones
Los Celtics están en el camino de quebrar el empate que tienen con los Lakers (17) como franquicias más ganadoras de la NBA