El asiento de Sergio “Checo” Pérez en Red Bull es el más deseado dentro de la parrilla de la Fórmula 1, pero al mismo tiempo, el más temido.
Checo tiene contrato con Red Bull para la siguiente temporada de F1 pero los rumores de una salida de la escudería tras una baja en el rendimiento, que incluso fomentó al asesor del equipo Helmut Marko, puso en duda su continuidad.
Pero, ¿realmente es tan sencillo ser un piloto de Red Bull y, sobre todo, ser compañero de Max Verstappen, quien está perfilado a ser uno de los mejores de la historia?
¿Verstappen, el compañero casi invencible?
En la Fórmula 1, el primer rival con el que se compara a un piloto es con su compañero y aún en el caso de que uno de los dos sea nuevo en el equipo, las comparaciones continúan a lo largo de la temporada, lo que actualmente coloca a cualquier piloto frente a la complicada tarea de si no vencer a Max Verstappen, al menos mantener el ritmo del reinante bicampeón de la categoría.
Aquí es donde se complica el asunto, desde 2018, ningún compañero ha podido vencer a Max y si nos vamos un poco más atrás, en 2017 Daniel Ricciardo logró vencer al neerlandés por 22 puntos, diferencia que no se ve tan grande cuando tomamos en cuenta que Verstappen abandonó siete carreras esa temporada incluyendo cinco abandonos de las primeras nueve carreras del 2009.
Ricciardo se marchó a Renault a inicios de 2019 dando inicio oficial a la era “Verstappen” pero también al dilema de quién acompañaría a “Mad Max” en su búsqueda de acabar con la sequía de títulos del equipo austríaco en la era híbrida.
Pierre Gasly es el último piloto en ganar un GP de Fórmula 1 conduciendo un Alpha Tauri (Monza 2020) y actualmente es el líder del equipo Alpine, pero a mitad de 2019, fue relegado de su asiento en Red Bull porque simplemente no podía mantenerse a la par con Verstappen en un RB15 que si bien es cierto no era el mejor carro de la parrilla, consiguió 3 victorias y 9 podios en esa temporada, obvio, todas a manos de Max.
Alexander Albon es otro de los talentos que a su salida de Red Bull ha podido recuperar su confianza como piloto tanto así, que luego de la temporada que está teniendo con el equipo Williams, existen rumores de que Helmut Marko se le acercó con la oferta de llevarlo de vuelta a Red Bull a lo que el piloto supuestamente respondió con un ‘no’ rotundo.
Albon fue el piloto elegido para reemplazar a Gasly en la segunda parte del 2019, y si bien es cierto que su rendimiento fue “superior” frente al de Gasly, la falta de experiencia y algo de mala suerte, como pasó durante el GP de Brasil 2020 en el que camino a su primer podio Lewis Hamilton lo sacó de la pista, hicieron que los directivos del equipo resumieran la búsqueda del compañero de Verstappen.
La llegada de “Checo” lo cambia todo
Sergio Pérez llegó a Red Bull en 2021 y brindó la estabilidad y experiencia para ayudar a Verstappen a salir campeón del Campeonato de Pilotos.
No fue coincidencia que en su quinta carrera vistiendo los colores de Red Bull, el mexicano logró su segunda victoria en la máxima categoría durante el GP de Azerbaiyán, y a lo largo de la temporada en numerosas ocasiones, el talento de Checo ayudó a Verstappen a mantener el liderato de la tabla ante un Lewis Hamilton que venía de ganar los últimos 4 títulos de manera consecutiva.
Tomando como mayor referencia de esto, la defensa de Checo Pérez ante el ataque de Hamilton durante el GP de Abu Dhabi 2021, arruinando su carrera (tuvo que abandonar por sobre calentamiento del motor), pero, ayudando a que Verstappen pudiese recortar la diferencia ante el británico en la carrera que decidió el campeonato.
En 2022, ante la amenaza directa es Ferrari y aunque Max saldría campeón en en el GP Suzuka, las victorias del mexicano en el GP de Mónaco y el GP Singapur, circuitos donde la pole era de Charles Leclerc, rival directo de Verstappen por el campeonato, ayudaron a la defensa del título del neerlandés mientras que Checo adquiriría el título de “El Rey de los Callejeros”, título que confirmaría en 2023 con victorias en Arabia Saudita y Azerbaiyán, de hecho, convirtiéndose en el primer piloto con dos victorias en las calles de Baku.
Durante la temporada 2023, Checo ya ha igualado las dos victorias de 2022 y a sabiendas de que aún quedan siete carreras en el calendario, el mexicano podría ganar su tercera carrera del año, lo que lo convertiría en el primer piloto de Red Bullen ganar al menos 3 Gran Premios en la misma temporada en la era de Verstappen, confirmando que es el mejor compañero que el neerlandés ha tenido en su carrera de Fórmula 1.
Las críticas no cesan
El dominio de Verstappen junto a una racha de cinco fines de semana en los que Checo no logró entrar en la Q3, le trajeron una avalancha de críticas tanto dentro del paddock como fuera. Si bien es cierto es auto de Red Bull es el mejor monoplaza de la temporada, es un coche que está diseñado para sacar lo mejor del piloto más rápido del equipo y ese, sin lugar a dudas hasta ahora siempre ha sido Verstappen.
Zak Brown, jefe de McLaren, dijo que con dos pilotos como Pérez en Red Bull, el campeonato estuviese más abierto; Lewis Hamilton también dijo que si el tuviese el auto de Checo, Max no estaría teniendo la temporada que lleva; y para agregar la cereza al pastel, Helmut Marko uno de los directivos de Red Bull dijo que la falta de rendimiento del tapatío es debido a que es ‘sudamericano’ y no tan enfocado como Vettel y Verstappen que son europeos.
El mayor problema de ser un piloto de Red Bull en la actualidad, no son las críticas externas e internas, esas siempre estarán y la presión de conducir en Fórmula 1 la tienen todos, el problema es enfrentarse cada fin de semana a lo que Verstappen puede hacer en un circuito para entonces recibir la avalancha de críticas por no poder vencerlo,
No, no estamos diciendo que Verstappen es el piloto más talentoso de la historia, lo que sí queremos aclarar es que el nivel del neerlandés en estos momentos solo podría ser igualado por pocos pilotos y aún así, mantenerse al ritmo de Max en un monoplaza que se desarrolla a su medida, es más difícil que ver a Logan Sargeant dominando el fin de semana en Suzuka.
Manejar un Red Bull es un arma de doble filo: te da el chance de pelear por victorias, pero a la vez te exige un nivel de conducción que pocos han tenido dentro de la máxima categoría, y aún cuando tu rendimiento supera con creces el de tus predecesores, no es suficiente para callar las críticas y por eso, es que el asiento de Checo es a la vez, el más deseado y el más difícil de la parrilla.