El Salvador aceptó recibir a cientos de presuntos pandilleros deportados desde Estados Unidos, muchos de los cuales permanecen recluidos en el Cecot
El presidente de El Salvador, Nayib Bukele, confirmó que se reunirá en abril con el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, en la Casa Blanca. En respuesta a una publicación del periodista Nick Sortor en la plataforma X, comentó: “Traeré varias latas de Coca-Cola Light”.
Bukele hizo el comentario en alusión a la conocida preferencia de Trump por esta bebida. Durante su primer mandato, el republicano tenía un botón rojo en el escritorio del Despacho Oval para solicitar una Coca-Cola Light cuando lo deseara. Este botón fue retirado durante la administración de Joe Biden, pero reinstalado tras el regreso de Trump al poder en enero pasado.
Sortor informó: “El presidente Trump recibirá al presidente de El Salvador, Nayib Bukele, en la Casa Blanca el próximo mes. El Salvador ha demostrado ser uno de nuestros mejores aliados al recibir a cientos de pandilleros del Tren de Aragua deportados para encarcelarlos. Nayib Bukele merece este reconocimiento más que cualquier otro líder mundial”.
El Salvador aceptó recibir a cientos de presuntos pandilleros deportados desde Estados Unidos, muchos de los cuales permanecen recluidos en el Centro de Confinamiento del Terrorismo. Esta megacárcel, inaugurada en 2023, tiene capacidad para albergar a 40,000 reclusos y está destinada a confinar a los criminales más peligrosos, incluyendo a supuestos miembros de pandillas como el Tren de Aragua.
El Cecot cuenta con estrictas medidas de seguridad, como cercas electrificadas, torres de vigilancia y tecnología avanzada para prevenir fugas y mantener el control interno. Así, este espacio se posiciona como uno de los más estrictos en toda Latinoamérica.
La cooperación entre ambos países se reforzó con la visita de la secretaria de Seguridad Nacional de Estados Unidos, Kristi Noem, al Cecot. Desde allí, advirtió que aquellos que ingresen irregularmente a Estados Unidos serán perseguidos, deportados y podrían enfrentar detención en instalaciones como esta prisión salvadoreña.
Noem agradeció a El Salvador por su colaboración en la encarcelación de los deportados y destacó que estas acciones forman parte de las herramientas de Estados Unidos contra el crimen.