La Policía puso a disposición del Ministerio Público a los miembros de la patrulla que actuó en el caso
A la muerte violenta del joven de 28 años Gregory Mena Montero, le precedió una persecución policial automovilística que desencadenó en la tragedia.
Gregory, a bordo de una camioneta todoterreno, era seguido por una patrulla policial, con al menos cinco agentes, desde el capitalino sector Cristo Rey y, al llegar a una estrecha calle del barrio La Esperanza de Los Ríos, fue interceptado por miembros de la unidad policial, sacado de su vehículo por uno de ellos, quien posteriormente lo ejecutó de un disparo.
El joven, que era «químico» dedicado a la elaboración de productos de belleza y de limpieza, según cuenta su familia, vivía en la avenida Los Próceres próximo a Los Ríos.
«La Policía no dio tiempo a que las autoridades pertinentes (El Inacif) recogiera su cuerpo… lo halaron como un perro», dice llorando una prima de Gregory presente en su velatorio.
Versiones de los hechos
La primera versión ofrecida por los medios de comunicación, ayer domingo 15 de diciembre, indica que la víctima había chocado a un motorista en Cristo Rey y que por eso era perseguido por la Policía.
La familia del hombre manifiesta que la Policía ni ha dado la cara ni tampoco ha presentado pruebas de ningún accidente que implique a Gregory.
El padre de Gregory, Julio César Mena Pérez, tenía seis años que no venía al país, y este suceso lo obligó a viajar desde Nueva York.
Julio César todavía no entiende como pudo ocurrir la muerte de su vástago y lo único que pide es que se le pueda hacer justicia.
«Tenía siete hijos, ahora me quedan seis. Me siento siento incompleto», lamenta el padre.
La partida de Gregory deja dos niños en la orfandad, uno de dos años y otro de cuatro.
Su cuerpo estará expuesto hasta mañana martes en la funeraria Betancourt en la avenida coronel Juan Maria Lora Fernández de Los Ríos, donde su familia recibe una multitud de gente que bien valoraban al occiso.
Lo que se vio en el videoviral
En el audiovisual, que circula por las redes sociales, se observa que el joven está dentro de su vehículo rodeado por policías y abre la puerta. En ese momento uno de los agentes lo saca a la fuerza y se lo lleva a la parte trasera de la camioneta, lo zarandea y luego le dio un disparo que le cegó la vida. Al lugar llegaron varios motoristas.
Agentes a disposición de la justicia
La Policía informó que puso a disposición del Ministerio Público a los miembros de la patrulla que actuó en el caso.
Indicó, además, que los agentes actuantes en el hecho serán presentados a primeras horas de este lunes ante las autoridades competentes para la individualización de responsabilidades que correspondan.
