Fue trasladada a Najayo Mujeres, a una celda de máxima seguridad y aislada de las demás reclusas
Ana Josefa García Cuello, acusada de decapitar a su hija de seis años el pasado jueves 15 de agosto, aún no ha sido sometida a la evaluación psiquiátrica ordenada por el juez que conoció la medida de coerción en la Oficina de Atención Permanente de Santo Domingo Este.
El magistrado Leomar Cruz Quezada ordenó el pasado 20 de agosto que el Instituto Nacional de Ciencias Forenses (Inacif) realice el examen. Sin embargo, nueve días después, la evaluación aún no se ha llevado a cabo.
La información fue confirmada a Diario Libre por Juan Concepción, abogado de la acusada, quien indicó que solicitarán al Ministerio Público una junta médica capacitada para evaluar la condición de salud de su clienta, quien es médico militar del Ejército de República Dominicana.
«Vamos a solicitar peritos en salud mental para que puedan dar su diagnóstico sobre la condición de Ana Josefa», precisó.
Está aislada de las otras reclusas
La resolución que autorizó el traslado de García Cuello a la cárcel de Najayo Mujeres se emitió esta semana. Según el abogado, la acusada fue trasladada el martes al penal, donde se encuentra en una celda de máxima seguridad, aislada de las demás reclusas.
Concepción considera que las condiciones de la cárcel no son adecuadas para su defendida, ya que no cuentan con los recursos necesarios para atender a personas con esquizofrenia, un trastorno que, según él, la mujer ha padecido durante los últimos 11 años.
«La precariedad es evidente. Los recintos carcelarios no tienen las condiciones adecuadas para realizar una evaluación objetiva de la salud mental«, expresó.
Sigue hablando incoherencia
El jurista agregó que Ana Josefa continúa hablando de manera incoherente y sigue «desconectada» de la situación que está viviendo.
Añadió que ella no está recibiendo el conjunto de medicamentos necesarios para tratar «su cuadro clínico».
«La medicación debe ser el resultado de una recomendación de un psiquiatra, especialista en conducta humana, sin embargo, eso no se ha hecho», sostuvo.