Autoridades de México investigaban el jueves (23.11.2023) el secuestro de tres periodistas y dos de sus familiares, capturados por hombres armados en la localidad de Taxco de Alarcón, Guerrero, en el sur del país, informó la Fiscalía General del Estado (FGE). ).
En un comunicado, la FGE precisó que uno de los periodistas desaparecidos es Marco Antonio Toledo Jaimes, director del Semanario Espectador de Taxco, corresponsal de N3 Guerrero, La Crónica, y Vespertino de Chilpancingo, secuestrado el pasado 19 de noviembre.
También se investiga el desfile de Silvia Nayssa Arce Avilés y Alberto Sánchez Juárez, una pareja de periodistas del medio digital RedSiete, capturados también por hombres armados el 22 de noviembre.
Lo anterior pudo ser corroborado por la organización Artículo 19, mientras que los familiares de los plagiados dieron a conocer públicamente su desaparición en sus redes sociales.
El artículo 19 explicaba que Toledo cubría temas políticos y de seguridad en los alrededores de Taxco y del estado sureño de Guerrero, y que su cobertura más reciente fue el impacto del huracán Otis el 25 de octubre.
17 periodistas asesinados en Guerrero
La organización también destacó que con 425 agresiones entre 2009 y 2023, el estado de Guerrero se posiciona como la quinta entidad mexicana con más ataques contra periodistas y medios de comunicación.
«El estado es también el segundo más letal contra la prensa, pues se tienen contabilizados 17 periodistas asesinados, siendo el último caso de Nelson Matus Peña. Así como tres periodistas desaparecidos, con el caso de Alan García, siendo el último caso documentado”, añadido.
La organización instó a las autoridades a aplicar los protocolos legales establecidos para en este tipo de investigaciones y atender su localización con oportunidad.
Los hechos se reportan una semana después del asesinato del fotoperiodista mexicano Ismael Villagómez en la fronteriza Ciudad Juárez, norte de México.
México es considerado el país sin guerra más peligroso para la prensa. En lo que va del año en cinco periodistas han sido asesinados en relación con su trabajo, con lo que la cifra asciende a 163 homicidios de 2000 a la fecha, según el relato del Artículo 19.