Las futbolistas españolas ponen fin al boicot después de que la federación se compromete a hacer cambios inmediatos

Las futbolistas españolas ponen fin al boicot después de que la federación se compromete a hacer cambios inmediatos

El conflicto entre la selección española femenina de fútbol y la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) parece haber llegado a un punto de inflexión después de que ambas partes, junto con el Consejo Superior de Deportes (CSD) del Gobierno, llegaran a una serie de acuerdos.

A principios de esta semana, 20 jugadoras convocadas por la selección reiteraron su negativa a jugar los dos próximos partidos de la UEFA Women’s Nations League, entre ellos el de este viernes contra Suecia.

Sin embargo, 21 de las 23 jugadoras seleccionadas para los próximos partidos aceptaron jugar y viajarán a Suecia, según un comunicado del presidente del CSD, Víctor Francos.

Dos jugadoras, las estrellas del Barcelona Mapi León y Patricia Guijarro, pidieron abandonar la plantilla alegando que su situación es «diferente a la del resto de compañeras».

Francos dijo a los periodistas en las primeras horas de este miércoles que se había alcanzado un «acuerdo muy sólido» entre todas las partes y prometió cambios inmediatos en el fútbol español respecto a «las políticas de igualdad de género, avanzando en la igualdad salarial, avanzando en la equidad de la calidad de las infraestructuras para el deporte y, en este caso, el fútbol femenino».

Añadió que las jugadoras no se enfrentarán a ninguna sanción al haberse negado inicialmente a jugar en los dos próximos encuentros.

«Las jugadoras también manifestaron su preocupación por la necesidad de hacer cambios en la Real Federación Española de Fútbol y la federación se comprometió a que estos cambios se hagan de forma inmediata. Todos entenderéis, en este caso, que la federación hará un comunicado al respecto», dijo a la prensa Francos en la madrugada de este miércoles.

«Las partes (…) han llegado a un punto en el que lo que podía haber sido un desastre no lo será y lo que podía haber sido una mala noticia parece que no lo será», dijo Francos.

También se creará una Comisión Mixta con representantes de los jugadores, la RFEF y el CSD para aplicar nuevos cambios en el futuro.

«En esa comisión hemos acordado unas competencias que abarcan todos los puntos que [las jugadoras] llevan tanto tiempo reclamando, como los cambios en el órgano del fútbol femenino, el plan estratégico del fútbol femenino y el resto de cambios de los que hemos estado hablando estos días», dijo este miércoles a la prensa Amanda Gutiérrez, presidenta del sindicato de jugadoras FUTPRO.

Montse Tomé, que sustituyó a Jorge Vilda al frente de la selección femenina tras la polémica de Rubiales, seguirá en su cargo tras haberse reunido en privado con las jugadoras, según Rafael del Amo, responsable de fútbol femenino de la RFEF.

Consultado sobre las aparentes declaraciones engañosas de Tomé en su rueda de prensa de este lunes sobre la ausencia de Jenni Hermoso en la convocatoria para «proteger» a la jugadora, del Amo dijo a los periodistas: «Creo que en este momento tenemos que protegerla de la presión que pueda surgir. Al final, es una jugadora en la que confiamos plenamente. Creemos que es así y hay que respetarla».

Tomé había seleccionado a la plantilla para los próximos partidos contra Suecia y Suiza, a pesar de que las jugadoras manifestaron su «firme voluntad de no ser convocadas por motivos que están justificados».

En declaraciones a los periodistas este miércoles sobre la salida de la selección junto a Guijarro, León dijo: «Es cierto que la situación de Patri y mía es diferente a la del resto de compañeras».

«Sabemos que no son los modos ni las formas de volver (…) Esto es un proceso. Estamos contentos porque también es verdad que se están produciendo cambios. Hemos llegado a otro puerto. Poco a poco se están produciendo cambios y en eso estamos apoyando totalmente a los compañeros como lo hemos estado haciendo desde fuera durante todo este tiempo», afirmó.

Por su parte, Guijarro dijo: «Están trabajando en esos cambios y nosotros estamos con nuestros compañeros, pero sí, es verdad que todavía no se han hecho, pero están trabajando en ello».

«Es bastante difícil y duro estar aquí, y con cómo ha pasado todo, mentalmente, no estás en condiciones de poder estar aquí».

Tanto León como Guijarro forman parte de un grupo de jugadores apodado ‘Las 15’ que están en conflicto con la RFEF desde hace más de un año y la gran mayoría se quedaron fuera de la convocatoria para el Mundial en julio y agosto.

 

Jennifer Hermoso, de la selección femenina de de fútbol de España, el 20 de agosto de 2023, en Sydney, Australia. (Elsa - FIFA/FIFA via Getty Images)

Jennifer Hermoso, de la selección femenina de de fútbol de España, el 20 de agosto de 2023, en Sydney, Australia. (Foto: Elsa – FIFA/FIFA via Getty Images)

Cómo se llegó hasta aquí

El anuncio de este miércoles es el último acontecimiento en una larga saga entre las jugadoras de la selección española femenina, que ganaron su primer título de la Copa del Mundo Femenina el mes pasado, y la RFEF.

La tensión entre ambas partes se intensificó después de que Luis Rubiales, expresidente de la RFEF, diera un beso no deseado a la jugadora española Jennifer Hermoso durante la ceremonia de entrega de medallas de la final del Mundial en Sydney.

Rubiales dimitió de su cargo y la Audiencia Nacional española sigue investigando posibles cargos de agresión sexual y coacción contra él, que los fiscales españoles dijeron a CNN que él niega.

El descontento de las jugadoras con la federación se remonta a hace más de un año, cuando 15 integrantes de la selección femenina absoluta («Las 15») enviaron cartas firmadas personalmente a la RFEF en las que afirmaban que no volverían a jugar con el equipo nacional a menos que se produjeran cambios radicales en todo el cuerpo técnico.

De las 15 jugadoras que firmaron las cartas, solo tres formaban parte de la selección española para el Mundial: Mariona Caldentey, Aitana Bonmatí y Ona Batlle. Ese trío fue incluido en la convocatoria de Tomé anunciada este lunes, junto con León y Guijarro.

A pesar de esos problemas extradeportivos, la joven selección española realizó una magnífica campaña en el Mundial femenino de Australia y Nueva Zelandia, derrotando a Inglaterra en la final para alzarse con su primer título.

La actuación de Rubiales durante la ceremonia de entrega de medallas y las consecuencias que siguieron eclipsaron el logro, que culminó con la dimisión del dirigente como presidente de la RFEF el 11 de septiembre.

Sin embargo, ahora que Vilda y Rubiales han dejado sus cargos, la RFEF espera iniciar un nuevo capítulo en el fútbol femenino.

Este lunes, antes de anunciar la lista de convocadas, emitió un comunicado en el que subrayaba su compromiso de aplicar cambios en la organización.

«Es evidente que la Federación, la sociedad y las propias jugadoras estamos alineadas con este mismo objetivo: la renovación y el inicio de una nueva era donde el fútbol sea el gran ganador de todo este proceso», decía el comunicado.

Compartir