El sui géneris caso de los aficionados defensores del que ya ganó, el cual hemos denominado bocinas post electoral es uno de los episódicos y carnavalescos espectros de la nueva forma de hacer política que tienen algunos pintorescos personajes del arcoiris de los rasgos y características de la personalidad que tenemos dentro del cultural cabildeo politiquero de la UASD.
Estos sujetos, se pasan un determinado tiempo sumergidos en un fanatismo patológico, en el que puede caer cualquier seguidor de un líder el cual se encuentra en una competencia y los mismos deben mantenerse permanente en un mercadeo, donde no solo defiendan a su candidato, sino que logren convencer a la mayoría de los votantes de que es su canditado y líder la mejor opción. Hasta este punto, es plausible el accionar de estos peculiares sujetos.
Donde nuestra capacidad de asombro la sentimos cruel y vilmente abusada, torturada y asesinada, es cuando ya lograda dicha meta, el mismo ex
