Migrantes adultos en refugios y hoteles de NYC tendrán 60 días para irse y medida genera rechazo

Migrantes adultos en refugios y hoteles de NYC tendrán 60 días para irse y medida genera rechazo

Desde que empezó la oleada de nuevos migrantes arribando a la ciudad de Nueva York hace ya un año, la Gran Manzana ha ayudado a más de 90,000 recién llegados, y justo cuando los refugios y hoteles de emergencia están a reventar, tras semanas implorando apoyo federal y estatal, este miércoles el alcalde, Eric Adams, anunció que los solicitantes de asilo adultos albergados en los más de 188 sitios abiertos, durante más tiempo, tendrán 60 días para buscar a donde irse. La Ciudad no reveló a cuántos migrantes afectará inicialmente.

Así lo reveló el mandatario, tras señalar que del total de 105,800 desamparados que viven en el sistema de albergues de la Ciudad, más de 54,000 son migrantes. El mandatario manifestó que el objetivo de la nueva medida es que quienes llevan más tiempo recibiendo refugio, busquen una manera de alojarse con amigos y familiares, o incluso moverse a sitios al norte del estado, a fin de que haya espacio para familias y niños que siguen llegando a los cinco condados.

Es la única forma en que podemos crear un espacio crítico para las familias y los niños (…) No queremos llegar al punto, y no llegaremos al punto, en el que las familias y los niños vivan en la calle”, manifestó el alcalde Adams, advirtiendo que los migrantes adultos comenzarán a recibir en los próximos días notificaciones en las que les dan 60 días para salir de los albergues. En caso de no encontrar sitio, deberán volver a solicitar un cupo, que solo se les dará si hay lugares disponibles. “No tenemos más espacio en la ciudad. Hemos hecho lo que más hemos podido, pero necesitamos apoyo de cada parte del Gobierno. Necesitamos dar pasos adicionales para crear más espacios”.

A pesar de la nueva movida, el burgomaestre aseguró que quienes reciban las notificaciones para encontrar viviendas alternativas, no serán abandonados, pues mencionó que les suministrarán servicios de asistencia social intensificados para ayudarlos a explorar otras opciones de vivienda.

De igual manera y a fin de desalentar que nuevos migrantes sigan viendo a la Gran Manzana como un sitio de apoyo ilimitado, pues a pesar de que autoridades federales afirman que el flujo migratorio en la frontera se ha reducido, cada día siguen llegando entre 300 y 500 migrantes, también crearán volantes y una campaña para que sepan que Nueva York no puede continuar brindando el nivel de servicio que ha dado hasta ahora.

Adams fue cuestionado sobre la posibilidad de que su nueva medida desencadene eventuales acciones legales contra la Ciudad por no garantizar refugio a todos los adultos migrantes que lo necesiten, y aseguró que ante la falta de apoyo federal y estatal, no tiene otra opción.

No puedo darme el lujo de sentarme a ver que pasa. Las cortes tendrán que hacer lo que tengan que hacer… dónde voy a poner a la gente que llegue. Nuestra meta es que ninguna familia ni ningún niño duerma en la calle, esa es nuestra meta”, insistió Adams, agregando que se mantiene abierto a contemplar todas las opciones posibles para brindar refugio.

El alcalde también volvió a hacer un llamado a las autoridades federales para que agilicen el trámite de permisos de trabajo a quienes buscan asilo, y afirmó que “nada es más antiestadounidense que no permitir a la gente trabajar”, lo que ayudaría a miles de recién llegados a pasar de un nivel a otro.

La vicealcaldesa de Salud y Servicios Humanos Anne Williams-Isom, reveló que en la última semana llegaron 2,800 nuevos migrantes, muchos de ellos familias con niños, por lo que defendió la necesidad de tener espacios usados por adultos solteros que llevan incluso más de un año en el sistema de albergue.

“A medida que continuamos abordando esta crisis humanitaria, debemos idear formas novedosas de mover a las personas dentro y a través de nuestro sistema para encontrar dónde se asentarán en última instancia”, aseguró la funcionaria. “Esta política permitirá una mayor flexibilidad para ayudar a los solicitantes de asilo a encontrar dónde pueden establecerse aquí en la ciudad o con sus seres queridos y amigos. La ciudad está y continuará ayudando a las personas y familias a encontrar refugio y conectarse con los servicios en su punto de conexión inicial con nosotros”.

Manuel Castro, comisionado de la Oficina de la Alcaldía para asuntos de Inmigrantes (MOIA), aseguró en diálogo con El Diario NY, que el nuevo plan es una manera de hacer que los migrantes que llevan mucho tiempo en el sistema de refugios puedan avanzar.

“Lo que se inició hoy es una manera de empezar una conversación para encontrar un siguiente paso con ellos, ver donde podrían encontrar una habitación, o una vivienda para abrir espacio para familias con niños que siguen llegando y a las que queremos apoyar”, dijo el Comisionado Castro. “Hemos estado encontrando espacios en otras partes del estado, como Buffalo, y una opción es transportarlos allá. Hasta ahora casi 40,000 solicitantes de asilo que han pasado por el sistema han salido y encontrado vivienda y sus propias opciones, y eso es lo que queremos que pase con todos y por eso estamos aumentando el apoyo para encontrar esas soluciones y que, como la mayoría que llega aquí, no han llegado a quedarse a albergues y hoteles sino que encuentran su camino por sí mismos en Nueva York”.

Familias con niños que llegan a NYC son la prioridad para albergarlos. Foto Edwin Martinez

Tras el anuncio del Alcalde, organizaciones defensoras de inmigrantes, como la Coalición de Inmigración de Nueva York (NYIC) levantaron sus voces de protesta y criticaron a la actual Administración Municipal por no ofrecer soluciones integrales de vivienda, como los vales de apoyo de renta CityFHEPS, que liberarían espacio en el sistema de refugios.

“El alcalde Eric Adams ofreció otra medida a medias miope al imponer cargas burocráticas innecesarias a los neoyorquinos vulnerables, en lugar de ofrecer soluciones reales que permitan a los solicitantes de asilo, y a todos los neoyorquinos, construir vidas seguras y estables en las comunidades en las que viven”, dijo Murad Awawdeh, director ejecutivo de NYIC. “Esta es una mala política que será directamente responsable de dejar a las familias sin hogar y viviendo en las calles. La nueva regla es un final abominable de nuestras leyes de derecho a la vivienda y no refleja los valores acogedores de la ciudad de Nueva York”.

El Defensor del Pueblo, Jumaane Williams, también se sumó a las reacciones de protesta y afirmó que a pesar de entender que albergar a miles de migrantes sin ayuda federal es un desafío para la Ciudad, afirmó que la solución no es negarles oportunidades de apoyo.

El derecho a la vivienda ha existido durante más de 40 años, y ese derecho no vence simplemente después de 60 días frente a una crisis. Si bien los desafíos de enfrentar esta emergencia son inmensos, también lo es nuestra obligación de hacer todo lo que podamos por las masas cansadas, pobres y hacinadas”, aseguró Williams. “Debemos centrarnos en ayudar a crear oportunidades para las personas que vienen aquí en busca de asilo, no en negar de manera preventiva que nuestra ciudad es el hogar de la oportunidad misma. Las soluciones a esta crisis ahora están en Albany y Washington, DC, no en restringir o rescindir los derechos de nuestros nuevos neoyorquinos necesitados”.

La organización Make the Road NY calificó el nuevo manejo que se le dará a los migrantes adultos en materia de albergue como “una propuesta imprudente” que busca expulsar a los solicitantes de asilo de los albergues y convertirlos en desamparados viviendo en las calles.

“Estamos consternados por la cruel indiferencia del alcalde Adams por el bienestar de las personas que buscan seguridad en nuestra ciudad. Expulsar a los solicitantes de asilo de los refugios y llevarlos a las calles es cruel e irresponsable”, aseguró Natalia Aristizábal, subdirectora de esa organización. “Como confirmó nuestra reciente encuesta de solicitantes de asilo, la mayoría de estos recién llegados simplemente no tienen la opción de quedarse con familiares y amigos. Esta política obligará a más personas a salir a la calle durante uno de los veranos más calurosos de la historia registrada”

La defensora de la comunidad inmigrante agregó que el Alcalde está legal y moralmente obligado a brindar soluciones reales a las personas sin hogar, pero sigue culpando a los demás y difundiendo información errónea.

El alcalde debería abandonar su nueva propuesta retrógrada y, en cambio, trabajar para firmar e implementar el paquete legislativo aprobado recientemente por el Concejo Municipal para ayudar a las personas sin hogar a mudarse de los refugios a viviendas permanentes, y para evitar que los neoyorquinos de bajos ingresos en riesgo de desalojo ingresen al sistema de refugios en primer lugar”, comentó Aristizabal. “La Ciudad tiene la obligación legal de garantizar que las personas que no tienen un refugio estén seguras. Las personas que buscan asilo en Nueva York merecen no solo dignidad sino también el apoyo adecuado para prosperar en sus nuevas vidas aquí (…) El alcalde debe revertir el rumbo de inmediato y, en lugar de perder tiempo y dinero culpando a los inmigrantes, trabajar con socios en todos los niveles del gobierno y en nuestras comunidades para enfrentar este momento”.

La nueva medida para los migrantes en los asilos en datos

  • 60 días tendrán los adultos recién llegados para buscar vivienda alternativa y abandonar los albergues y hoteles cuando reciban su notificación de salida
  • Los migrantes adultos solteros que llevan más tiempo en los albergues serán los primeros en recibir la notificación
  • Si no encuentran opciones, deberán volver a solicitar albergue, que solo se otorgará si hay espacio disponible
  • El plan busca tener espacio disponible para familias con niños que siguen llegando y necesitan refugio
  • 105,800 personas se encuentran actualmente en el sistema de albergues de la Ciudad de Nueva York
  • 54,000 de ellos son migrantes recién llegados
  • 90,000 migrantes han pasado desde el añno pasado por el sistema de refugios
  • 36,000 migrantes han salido de los albergues por sus propios medios o apoyo de familias y amigos
  • 2,800 nuevos migrantes llegaron en la última semana
  • 300 a 500 migrantes siguen llegando cada día a la Gran Manzana
  • 188 sitios de albergue hay en la Gran Manzana
  • 13 han sido abiertos como sitios de emergencia
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